
En verano es el momento de revisar las cubiertas de los edificios. Cada año, con las lluvias de Otoño, proliferan las goteras y humedades en los edificios. Su reparación es el problema principal con que se encuentran las comunidades de propietarios, que generalmente deben asumir el coste de la reparación de los daños causados a las viviendas de las últimas plantas, además de iniciar la reparación de la cubierta. UNA REVISIÓN A TIEMPO PUEDE SUPONER UN GRAN AHORRO.
La cubierta es el elemento de la envolvente del edificio que más sufre os efectos de cambio de temperatura y las dilataciones que ello conlleva. Esto provoca que con el tiempo que las uniones y estanqueidad de materiales se resientan, junto con la durabilidad de los sellantes de las juntas y elementos de la cubierta. Estos fenómenos provocan filtraciones en nuestro edificio.
Del blog de «Tu edificio informa»