Para vender o alquilar tu vivienda es obligatorio tener un certificado de eficiencia energética que indique cuánto consume la casa de la A (más eficiente) hasta la G (menos eficiente).
Si no lo tienes, te pueden poner una multa de entre 300 y 600 euros.
Por mucho menos, visito tu vivienda y realizo un análisis completo de todos los factores que influyen en el control energético, desde la orientación del inmueble hasta los cerramientos y ventanas o las instalaciones existentes.
Desde 140€ para viviendas en edificios hasta 250€ para unifamiliares.